¿Adelgazar sin hacer dieta? 12 consejos para conseguirlo rápida y saludablemente

La vuelta a la rutina y a la vida real después de las vacaciones nos obliga a retomar algunas costumbres que durante la época estival habíamos dejado de lado. Y es que el verano es por excelencia el tiempo perfecto para coger peso, dado el aumento de las comidas fuera de casa y las estancias en hoteles con buffet libre.

Pero, ¿cómo deshacernos de esos kilos de más que no queremos tener? Aunque lo más sonado sea dar comienzo a una dieta, contar las calorías que ingerimos no es la única forma, ni la mejor, para perder peso.

No tenemos que obsesionarnos con lo que ingerimos. Lo más eficaz es ir incorporando poco a poco diferentes hábitos a nuestra rutina, que a largo plazo se verán reflejados en la báscula. Así que si eres de esos a los que no les gusta seguir un régimen para adelgazar, te damos 11 consejos para perder peso sin tener que controlar estrictamente lo que comes.

12 trucos para adelgazar sin dieta

1. Come la fruta entera

 Apuesta mejor por comer la fruta entera antes que tomarla mediante zumos o batidos.

2. Adiós al azúcar

Aunque no seamos conscientes, muchos de los alimentos que compramos en el día a día llevan azúcar. Por ello, vigila los ingredientes de lo que comes, siendo los azúcares naturales aconsejables y evitando los refinados. La comida real se alza como la forma más sencilla de evitar azúcares añadidos. Intenta primar ese tipo de alimentos y deja los procesados para momentos puntuales.

3. Come despacio

La leptina es la hormona que adelgaza, y si comemos despacio estaremos potenciándola. Además, si ingerimos los alimentos tranquilamente nos sentiremos saciados antes. Tal y como expone el mindful eating, comer despacio también nos ayudará a estar más tranquilos y no potenciar tanto el cortisol, hormona del estrés que nos puede hacer engordar.

4. Bebe agua antes de comer

Beber agua media hora antes de comer puede ayudarte a adelgazar, incrementando la pérdida de peso hasta en un 44% en 3 meses.

5. Adelanta 1 hora tus comidas

Aunque es cierto que los españoles tenemos unos horarios bastante tardíos para realizar las comidas, tenemos que intentar adelantarlas, ya que irnos a comer con la tripa llena no es una buena idea.

6. Aparca el coche

Como ya sabemos, moviéndonos más conseguimos mejorar nuestro peso. Para lograrlo, aparca el coche y haz más trayectos andando, ya sean ir al trabajo, a hacer recados o para quedar con tus amigos. La bicicleta también es una buena opción.

7. No comas con distracciones

Si no prestamos atención a lo que tenemos en el plato probablemente queramos más cantidad. Si mientras comemos estamos pendientes de la televisión, del móvil, de videojuegos u otros medios, no nos estaremos dando cuenta de la cantidad de comida que ingerimos.

8. Apuesta por las escaleras

Intenta incorporar a tu rutina el hábito de subir y bajar escaleras sin necesidad de utilizar los ascensores o las mecánicas. El ejercicio, en cualquiera de sus variantes, es siempre bueno.

9. Toma el sol

La falta de vitamina D está estrechamente relacionada con el sobrepeso y la acumulación de grasa en la tripa. Por ello, es recomendable una exposición solar de 20 minutos diarios.

10. No te estreses

La leptina podría alterarse ante la falta de sueño y el aumento del estrés. Además, los nervios propician el aumento del cortisol, por lo que ambos factores harán que tengas más hambre y quieras darte más caprichos. Practicar meditación puede ayudarte mucho.

11. Duerme media horita más

Si te faltan horas de sueño, la leptina podría verse alterada. El descanso es tan importante como la alimentación a la hora de perder peso.

12. Haz algún ayuno intermitente

Aunque no es para todo el mundo, hacer algún periodo de ayuno intermitente de vez en cuanto es una de las mejores formas de ayudar a tu cuerpo a quemar grasa y activar el metabolismo.

Aunque controlar los ataques repentinos de hambre no es tarea fácil, podemos “engañar a nuestra mente” ingiriendo alimentos crudos que nos mantengan satisfechos por más tiempo. Entre estos están las gambas, la batata, las bebidas proteicas, la clara de huevo, el café frío, las zanahorias, la pechuga de pollo, los frutos secos o el melón, entre otros. Inclúyelos en tu dieta para que tus “antojos” se reduzcan considerablemente.