Hígado sano: el mejor filtro para eliminar toxinas y prevenir enfermedades

En la búsqueda por llevar un estilo de vida saludable, es común encontrarse con diversas tendencias de detoxificación. Una de las más populares es el consumo de zumos verdes. Sin embargo, aunque estos zumos pueden ser un complemento a una dieta equilibrada es fundamental comprender que el verdadero proceso de desintoxicación del cuerpo recae principalmente en un órgano vital: el hígado.

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El hígado es uno de los órganos más grandes y complejos del cuerpo humano. Su función principal es filtrar la sangre proveniente del tracto digestivo, antes de pasarla al resto del cuerpo. Tienes más de 500 funciones corporales. Entre sus múltiples responsabilidades destacan:

1. Desintoxicación. El hígado convierte productos endógenos (hormonas, bilirrubina) y exógenos (tóxicos) en compuestos inofensivos o los elimina del cuerpo.
2. Producción de bilis. Es esencial para la digestión y absorción de grasas y vitaminas liposolubles además de ser un potente antimicrobiano y vehiculizar toxinas
3. Almacenamiento de nutrientes. Guarda vitaminas como las A, D, B12 y minerales como el hierro para su uso futuro.
4. Regulación del metabolismo. Regula los niveles de glucosa, grasas y proteínas en el cuerpo.
5. Función inmunológica. Es un filtro inmunitario clave con gran capacidad inmunoreguladora.

No obstante, hay que tener en cuenta que el hígado solo puede hacer una actividad a la vez, por lo que si lo tenemos ocupado eliminando tóxicos no podrá realizar las demás funciones. Y eso tendrá consecuencias para nuestra salud.

Detoxificación: más allá de los zumos verdes

Si bien los zumos verdes pueden ser una buena fuente de vitaminas y minerales, no son la panacea para la desintoxicación del cuerpo. Como siempre digo en consulta, el hígado, con su capacidad natural de filtrar y eliminar toxinas, juega un papel mucho más crucial. Aquí te comparto una serie de trucos para apoyar y cuidar tu hígado para un detox efectivo:

1. Apuesta por una dieta antiinflamatoria. Incluye alimentos ricos en fibra, verduras, tubérculos, fruta, legumbres, proteínas de calidad y grasas saludables. Evita el consumo excesivo de procesados cargados de azúcares, harinas refinadas y grasas hidrogenadas. Estas sustancias dañan al hígado. Mis alimentos favoritos para cuidar del hígado son:
   – Ajo. Es rico en alicina y selenio, que son componentes naturales que ayudan en la limpieza del hígado.
   – Cítricos. El limón, el kiwi  o los pimientos son ricos en vitamina C, un gran protector hepático.
   – Vegetales de hoja verde. Espinacas, rúcula o acelgas , entre otros, contienen clorofila que ayuda a eliminar toxinas y a neutralizar metales pesados y sustancias químicos.
   – Alimentos con acción colerética. Son aquellos que ayudan a producir bilis, facilitando sobre todo la digestión de las grasas. Se suelen caracterizar por tener cierto sabor amargo: espárragos, alcachofas, endibias, escarolas, rábanos…
   – Caldo de huesos. El caldo de huesos es rico en glicina, un precursor del glutatión, uno de los mayores antioxidantes del cuerpo además de participar en la fase II de detoxificación hepática.
   – Cúrcuma. Tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. La curcumina puede ayudar a eliminar toxinas y reducir el daño causado por los radicales libres.
   – Brócoli y coles de Bruselas. Estos vegetales contienen compuestos que aumentan la producción de enzimas desintoxicantes en el hígado y mejoran su capacidad para eliminar toxinas.
2. Hidrátate. Beber suficiente agua ayuda al hígado a filtrar las toxinas de manera más eficiente
3. Practica ejercicio regular y suda. Mantener un peso saludable reduce el riesgo de hígado graso y otras enfermedades hepáticas. Además, sudar nos ayuda a eliminar toxinas. Por ello también es muy recomendable la sauna.
4. Las infusiones, tus aliadas. Algunas infusiones como el cardo mariano, la alcachofera, el boldo o el té verde  pueden apoyar la salud hepática.
5. Evita el alcohol. El alcohol sobrecarga y daña el hígado, impidiendo su capacidad para desintoxicarse.
6. Evita automedicarte. Algunos medicamentos pueden ser tóxicos para el hígado por lo que no podemos abusar de su consumo y siempre debe hacerse bajo supervisión médica
7. Evita exposición a sustancias tóxicas. Minimiza el contacto con productos químicos tóxicos en tu entorno, como pesticidas, plásticos, metales pesados y productos de limpieza agresivos.

Para un detox efectivo es crucial priorizar la salud del hígado en lugar de depender únicamente de modas temporales como retos detox o  zumos verdes. Una dieta antiinflamatoria, un estilo de vida saludable y la reducción de la exposición a toxinas son estrategias clave para mantener tu hígado en óptimas condiciones. Recuerda que un hígado sano es fundamental para la desintoxicación y el bienestar general de tu cuerpo. ¡Cuida tu hígado y él cuidará de ti!

Beatriz Rakosnick Dietista, health coach y psiconeuroinmunóloga. Junto con María Goyanes es socia-fundadora de Cooldo, una compañía de caldos cien por cien ecológicos con alto contenido en proteínas y colágeno.