
Piensas que decides con libertad, pero tu mente inconsciente puede sabotear tus elecciones. FOTO: Pexels.
MENTE
Cómo conectar con tu mente inconsciente para tomar mejores decisiones
Crees que decides de forma lógica y racional, pero tu mente inconsciente influye más de lo que imaginas. Aprender a reconocer su impacto te permitirá tomar decisiones más alineadas con lo que quieres.
Por María Corisco
25 DE ABRIL DE 2025 / 13:15
Crees que cada decisión que tomas es fruto de un análisis lógico y racional. Evalúas pros y contras, sopesas opciones y piensas que eliges con plena conciencia. Sin embargo, la realidad es mucho más compleja: mientras te crees que tienes el control, una parte silenciosa dentro de ti ya ha inclinado la balanza sin que lo notes: es la mente inconsciente.
Puede que este ejemplo te ayude a verlo mejor: imagina que entras a una cafetería con la intención de pedir un café solo, pero al ver a alguien disfrutando un cappuccino con espuma cremosa, de repente cambias de opinión. ¿Fue una elección racional o simplemente tu inconsciente reaccionó a una imagen apetecible? Tu cerebro está programado para procesar miles de estímulos sin que te des ni cuenta, y muchas veces decide antes que nuestra parte consciente.


Este segundo nivel de pensamiento no es tu enemigo; al contrario, te ayuda a tomar decisiones rápidas e intuitivas. Pero, si no aprendes a reconocer su influencia, puedes caer en automatismos que te alejan de lo que realmente quieres. Conectar con la mente inconsciente no significa ignorar la lógica, sino integrarla de manera inteligente para tomar decisiones más acertadas y alineadas con lo que realmente buscas.
La mente lógica y la mente inconsciente
Tener una mente inconsciente y una mente lógica significa que el cerebro opera en dos niveles distintos, pero complementarios.
- La mente lógica (o consciente) es la parte racional y analítica. Es la que usas para tomar decisiones deliberadas, resolver problemas y procesar información de manera estructurada. Es lenta, requiere esfuerzo y tiene una capacidad limitada de procesamiento.
- La mente inconsciente es más rápida, automática e intuitiva. Funciona en segundo plano, almacenando experiencias, emociones y patrones de comportamiento sin que nos demos cuenta. Influye en tus decisiones, reacciones y percepciones, incluso cuando crees que estamos actuando de manera puramente racional.
Ambas interactúan constantemente. Por ejemplo, cuando aprendes a conducir, al principio usas la mente lógica para recordar cada paso, pero, con el tiempo, la mente inconsciente automatiza el proceso. Lo mismo ocurre con muchas de tus emociones, hábitos y juicios diarios.
La lucha entre las dos mentes
Es habitual que haya desacuerdos entre la mente lógica y la mente inconsciente. Es lo que se conoce como disonancia cognitiva, y es cuando sientes un conflicto interno entre lo que piensas racionalmente y lo que sientes o hacemos de manera automática. Simplificando mucho los conceptos, es la lucha entre la razón y el corazón.
- Quiero dejar de comer ultraprocesados, pero me cuesta resistirme a un snack cuando estoy estresado. Mi mente lógica sabe que no es saludable, pero mi mente inconsciente, que asocia la comida con placer o alivio, me empuja a hacerlo.
- Sé que una relación no me conviene, pero sigo sintiéndome atraído por esa persona. Aquí, la razón y la emoción van en direcciones opuestas.
- Tengo talento y experiencia, pero sigo sintiendo que no soy lo suficientemente bueno. Esto ocurre cuando la mente inconsciente ha internalizado inseguridades o creencias limitantes.
«La mente lógica, que procesa información de manera secuencia y analítica, a menudo entra en conflicto con la mente inconsciente», explica José Ramón García Guinarte, director del Instituto de Neurociencia & Alto rendimiento y autor de Neurociencia para ser feliz, que detalla que estos desajustes pueden causar:
- Decisiones irracionales influenciadas por prejuicios y experiencias pasadas.
- Comportamientos automáticos desajustados, como el miedo o la ansiedad.
- Dificultad para cambiar hábitos profundamente arraigados.
- Comunicación interna ineficiente que impide el autoconocimiento y el desarrollo personal.
Tomar el control
A su juicio, «es muy importante tomar el control, no podemos dejarlo en manos de la mente primitiva«, y apunta que el miedo, originado en la mente inconsciente como mecanismo de supervivencia, «puede convertirse en un obstáculo significativo en la vida moderna». Para contrarrestarlo, sugiere técnicas como la visualización positiva, ya que imaginar situaciones activa las mismas áreas cerebrales que experimentarlas realmente, ayudando a reprogramar la mente hacia estados más saludables y felices
Entender la influencia de la mente inconsciente es un punto de partida. No se trata se trata de controlarla completamente -lo cual sería prácticamente imposible sino de reconocer sus efectos y aprender a gestionarlos mejor.
- Evitar decisiones impulsivas o sesgadas. Muchas de tus elecciones diarias están guiadas por sesgos cognitivos e impulsos inconscientes. Por ejemplo, el sesgo de confirmación te hace buscar información que refuerce tus creencias previas, sin cuestionarlas. Si eres conscientes de estos mecanismos, puedes tomar decisiones más racionales.
- Modificar hábitos negativos. La mayoría de los hábitos están arraigados en el inconsciente. Comer por ansiedad, procrastinar o reaccionar de cierta manera ante el estrés son respuestas automáticas que pueden cambiarse con autoconocimiento y práctica consciente.
- Mejorar la regulación emocional. Tus reacciones emocionales muchas veces provienen de experiencias pasadas que quedaron registradas en el inconsciente. Identificar patrones permite desactivar respuestas automáticas que podrían no ser útiles en el presente.
- Alinear tus acciones con tus objetivos. Muchas veces dices que quieres algo, pero actúas de manera contraria. Esto puede deberse a que tu inconsciente tiene creencias o miedos que te sabotean. Detectarlos ayuda a reprogramar las respuestas y trabajar en tu verdadera intención.
No se trata de luchar contra la mente inconsciente, sino de entenderla, trabajar con ella y moldearla a nuestro favor. ¿Y cómo hacerlo? Hay distintas técnicas que pueden ayudarte en este sentido:
- Autoobservación: pregúntate por qué actúas o reaccionas de cierta forma.
- Mindfulness: entrena la atención plena como ayuda para notar tus patrones automáticos.
- Reestructuración cognitiva: cuestiona y cambia pensamientos irracionales.
- Exposición progresiva: si un miedo inconsciente te limita, enfrentarlo poco a poco ayuda a desactivarlo.
- Visualización y repetición: para instalar nuevos hábitos, es útil imaginarse realizándolos con éxito.
- TEMAS
- PSICOLOGÍA
WeLife hoy
Trauma generacionalBlurringAgua fríaBebida memoriaMente inconscienteSiguenos :)