No es sólo que llene tus días de energía y sabor y te ayude a mantener la línea. El zumo de zanahoria es muy rico en carotenoides, vitaminas y minerales que aportan multitud de beneficios para la salud.
Priorizan el consumo de frutas y verduras, pero restringen el de otros muchos alimentos saludables, por lo que pueden causar un déficit nutricional. Y en ningún caso preservan la alcalinidad del organismo.
Tomar yogur a diario tiene múltiples beneficios para tu salud. Además de ayudarte a perder peso. Pero, hay que tener cuidado con los que tienen azúcares añadidos.
Rico en ácido oleico y en compuestos con un potente efecto antioxidante, este aceite es la mejor opción para cocinar a altas temperaturas.
Comer en orden los alimentos aumenta la saciedad, por lo que conseguimos menor ingesta calórica y un mayor déficit energético.
Salvo en caso de celiaquía, seguir una dieta sin gluten no sólo no conlleva beneficios para la salud, sino que puede generar el déficit de algunos nutrientes. Y además, es considerablemente más cara.
La musculatura abdominal es una parte más dentro del core y fortaleciendo sólo esa zona, estarás descuidando músculos muy importantes.
Rica en vitaminas D y E y calcio y baja en calorías, la bebida de almendras potencia las defensas y la salud cardiovascular, y es una alternativa ideal a la leche de vaca.
El almidón resistente resiste a la digestión llegando intacto hasta el colon, donde sirve como fuente de alimento para las bacterias que forman la microbiota.
Basada en los principios de la filosofía Samkhya y la medicina ayurvédica, esta dieta vegetariana aporta numerosos beneficios a la salud, pero no está exenta de causar un déficit nutricional.
Ligeramente más exigente que la clásica, practicar la sentadilla cosaca mejorará tu movilidad, coordinación y equilibrio y hará que ganes aún más fuerza en tu tren inferior.